sábado, 2 de septiembre de 2017

Matorrales


Sueños




He recogido sueños en el matorral
Donde emergen como brotes

Arranco uno por uno y los pongo
En un canasto de fibras vegetales.


Los llevo a casa y los arrojo en
Una mesa envejecida y rota

los brotes con sus esquirlas
Anuncian capullos incipientes.


Algunos caen al piso entre las
Rajaduras de esta vieja mesa

Nunca los recojo, son sueños
Perdidos Irremediablemente.


A los tallos los acomodo en ramos
Según tamaño y maduración


Así, pues ya son míos,
Tengo sueños muy probables.


Y tengo sueños menos probables
Todos son posibles, sin embargo,

Algunos se manifestarán pronto
Otros más tarde.


Como no sé qué sueño es cual
Imposible saberlo hasta que
Se revele cobrando existencia

No hay ninguno malquerido.


Lo sueños explotan en bellas plántulas

Con tan sutiles tan efímeras raíces
Que su fragilidad las hace difíciles
De colocar en el florero de la fe.


Cierto lo habéis percibido bien

Los sueños verdaderos los cogemos al azar
Los adoptamos cuidamos alimentamos
Los amamos y con cariño los sustentamos.


Cuando los sueños están fuertes y lozanos

Al jardín de los deseos los trasplantamos

En el lagar se vuelven plantas
Crecen y entonces nos dan los frutos




Que cosecha el alma.